De noche.

Iba a escribir que me carga dormirme con la cara llena de lágrimas. Pero ahora que lo pienso... no sé si se así. Mi corazón latía rápido porque te estaba odiando, porque no pensé que las cosas tomarían este rumbo... y quice tenerte cerca para gritarte y decirte que no tienes idea de nada. Y quice luego besarte y decirte que no deseo que te vallas estando así conmigo...
Las lágrimas aparecen porque sí, porque de es de noche, porque son las 3 de la madrugada y a esa hora acostumbran a brotar... aparecen como un salado calmante, un sedante que reduce los latidos... que de a poco me quita la expresión y que me introduce en esto. Aparecen ellas, involuntariamente, aparecen aunque con toda mi fuerza esté tratando de reprimirlas...
La noche ya no es joven... pronto será hoy y las cosas seguirán con normalidad, y no te pensaré, y no te extrañaré, y no desearé hablarte, y no querré besarte... Y no querré quererte... No querré nada, hasta que llegue la noche.